VENERACIÓN A LA IMAGEN DE LA DIVINA MISERICORDIA Y CONSEGRACIÓN
De rodillas:
Jesús, de la Divina Misericordia a Ti consagro mi vida, desde el día de hoy, entera sin reserva. En Tus manos abandono mi pasado, mi presente, y mi futuro, desde hoy en adelante, hazme un verdadero seguidor de Tus enseñanzas. Que la Imagen de Tú Divina Misericordia proteja mi hogar y mi familia de todas las fuerzas del mal en el mundo de hoy. Que todos los que la veneren, nunca perezcan. Que sea su alegría en la vida, su esperanza en la muerte. Y su gloria en la eternidad. Amén.
ORACIÓN DE CONSAGRACION A MARÍA MADRE DE MISERICORDIA
Oh María, Madre y Señora mía, te ofrezco mi alma, cuerpo, vida, y muerte, y todo lo que venga después. Lo dejo todo en tus manos, Oh Madre mía, cubre mi alma con tu manto virginal, y concédeme la gracia de la pureza de corazón, alma y cuerpo. Defiéndeme con Tu poder contra todos los enemigos, especialmente contra aquellos que esconden su malicia bajo la máscara de la bondad. Oh María, Tú eres mi gozo, porque por Ti, Dios descendió a la tierra y a mi corazón. Amén.
ORACIÓN PARA OBTENER UN CORAZÓN MISERICORDIOSA (TODOS)
Oh Jesús, comprendo que Tu misericordia va más allá de la imaginación y por tanto Te suplico que hagas mi corazón tan grande que pueda contener las necesidades de todas las almas que viven sobre toda la faz de la tierra. Oh Jesús, mi amor se extiende más allá, hasta las almas que sufren en el purgatorio y quiero expresar mi misericordia hacia ellas mediante las plegarias que tienen las indulgencias. La Divina Misericordia es insondable e inagotable como Dios Mismo es insondable. Aunque usara palabras enérgicas para expresar la Divina Misericordia, todo esto seria nada en comparación con lo que es en realidad. Oh Jesús, haz mi corazón sensible a todos los sufrimientos de mi prójimo, sean de cuerpo de del alma. Oh Jesús mío, sé que Te comportas con nosotros como nosotros nos comportamos con el prójimo.
Amen.
(Diario 692)